El Gobierno de Aragón ha declarado el interés autonómico y general del proyecto de unión de las estaciones de esquí de Astún y Formigal (Huesca) a través de una telecabina, un proyecto que se llevará a término en tres anualidades y que puede generar hasta 575 empleos y un impacto económico de 70,6 millones de euros a los tres años de su puesta en marcha.

La consejera de Economía, Planificación y Empleo, Marta Gastón, ha presentado el acuerdo este lunes, 20 de marzo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, donde ha explicado que las objeciones planteadas la semana pasada por la Dirección General de Ordenación del Territorio han sido resueltas mediante un informe de la Secretaría General Técnica de su Departamento, que rechaza los «criterios genéricos» y las «apreciaciones subjetivas» de Ordenación del Territorio.

«Este proyecto está elaborado con delicadeza», ha expuesto Gastón, haciendo hincapié en que los autores «quieren mucho a su montaña» y que es la alternativa menos gravosa para el medio ambiente. Ha recordado que el Gobierno de Aragón, la Diputación de Huesca, Aramón y los propietarios de Astún firmaron el convenio marco de colaboración el 14 de febrero pasado y tres días después Formigal solicitó la declaración de inteés autonómico y general, que este lunes ha resuelto el Consejo de Gobierno, y esta semana se iniciarán los trámites de la declaración de impacto ambiental.

Gastón ha negado que sea una actuación «no equilibrada», destacando el apoyo al proyecto por parte de los Ayuntamientos de Jaca, Sallent de Gállego y Canfranc (Huesca), también de la Conferencia Sectorial de Turismo, que así lo manifestó el pasado 14 de diciembre.

La consejera ha estimado que con este proyecto se impulsan los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y que se recogen medidas para «paliar los efectos negativos» en el orden medioambiental y que el INAGA lo evaluará.

Los proyectos vinculados a estaciones de esquí, incluidos los remontes y teleféricos y demás instalaciones asociadas, como sucede en el presente expediente, tienen el carácter de un Plan o Proyecto de Interés General de Aragón y son considerados por la normativa territorial aragonesa como instalaciones de servicios o de ocio de especial importancia y como actuaciones territoriales relevantes.

«El proyecto se ha presentado después de un estudio exhaustivo y es la alternativa que menos impacto genera en el territorio«, ha subrayado Gastón, indicando que la unión de estaciones mediante una telecabina se ampara en «la sostenibilidad» y que no habrá un nuevo centro invernal, ni se construirán nuevos aparcamientos ni habrá desarrollo urbanístico alguno, manifestando que si no hubiera un «mínimo» impacto en el medio natural no se podría construir ninguna estación de esquí ni carretera alguna en los territorios de montaña.

La inversión se elevará a 34 millones de euros en tres anualidades y que en la fase de construcción habrá una inversión directa de 24,7 millones y se crearán 215 empleos directos, que se ampliarán a 575 con su puesta en marcha, ha dicho Marta Gastón. El impacto será «duradero» y se pretende cambiar el modelo turístico para desestacionalizarlo y favorecer el asentamiento de población.

El proyecto conlleva una inversión de 34.095.494 euros (IVA incluido), que se ejecutará en tres anualidades, financiada con fondos europeos Next Generation-EU.

LA UNIÓN DE ESTACIONES POR CANAL ROYA

La unión de las estaciones de Astún y Formigal mediante una telecabina a través del valle de Canal Roya dará origen a un dominio esquiable de 180 kilómetros, único en España, gracias a la unión de los dos dominios ya existentes, sin generar pistas nuevas. Junto con Candanchú y Panticosa, el domingo total superará los 280 kilómetros de pistas.

De esta forma, este proyecto estratégico contribuirá a posicionar las estaciones de esquí del Pirineo como destino turístico internacional. El objetivo es cambiar el modelo de esquí de fin de semana por un modelo de semana completa y desestacionalizar la actividad ligada a la nieve.

Asimismo, se pretende mejorar la movilidad entre valles, creando un equipamiento eficiente y sostenible, impulsando y dinamizando la economía y oferta turística y fijando población en la zona.

Para ello se instalará una telecabina monocable desembragable con 116 cabinas de 10 plazas sentadas y una capacidad de transporte de 2.400 personas a la hora. El sistema seleccionado contará con dos instalaciones –dos secciones/bucles de cable– independientes, con una estación intermedia en el valle de Canal Roya que, al igual que la ubicada en la estación de Formigal, se soterrará parcialmente para minimizar el impacto visual.

Las estaciones motrices se ubicarán, una en el collado de Espelunciecha y otra en la estación intermedia del valle de Canal Roya, y la estación de reenvío, en el collado de Astún. El trazado es prácticamente en línea recta, realizando un pequeño ángulo en la estación intermedia y con una longitud aproximada de 4 kilómetros.

El terreno por el que discurre el trazado es monte de titularidad púbica correspondiente al término municipal de Canfranc. Además, el proyecto incluye la instalación de una línea subterránea a media tensión de 4.033 metros dividida en dos tramos y centros de transformación.

También contempla la modernización de las estaciones no sólo con la telecabina, sino también a través de la oferta de servicios como el control de accesos –integración a través de la app e instalación de cámaras de comprobación de usuarios–, paneles de señalización –desarrollo de sistemas interactivos más dinámicos– y mejoras en la seguridad a través del desarrollo de un sistema moderno de protección, monitoreo y control de las avalanchas.

Estas actuaciones van dirigidas al desarrollo de un proyecto basado en el concepto de estación inteligente que incluye una gestión integral innovadora de la seguridad, de las comunicaciones, de la propia gestión comercial, y del cuidado del medio ambiente y la concienciación del visitante.

La mejora de la movilidad entre valles disminuyendo el uso de vehículo particular reducirá las emisiones de CO2 en 437 toneladas al año, y dotando a los visitantes de una oferta turística más integrada.

La solicitud de declaración de interés presentada por Aramón está acompañada de una memoria de la actuación proyectada en la que se recogen todas estas características fundamentales del proyecto y la justificación de su interés general, la inserción del proyecto en el modelo territorial de la Comunidad Autónoma definido en la Estrategia de Ordenación Territorial de Aragón, la previsión del impacto territorial y las previsiones organizativas para su gestión y el fomento de las actividades económicas y sociales que garanticen la distribución de los aprovechamientos. Además, se incluye un exhaustivo estudio de impacto ambiental.