El Ayuntamiento de Monzón ya está contando las horas para el XX Homenaje a Guillem de Mont-Rodón donde todo apunta a una participación récord. De las ganas de Mont-Rodón dan buena cuenta dos datos: los más de 80 puestos en el mercado, con numerosas solicitudes que no han podido ser atendidas, y las numerosas peticiones para participar en las jaimas, con un total de 35 carpas con una capacidad para un millar de personas. Los actos se desarrollarán los días 20, 21 y 22 de mayo. 

El alcalde, Isaac Claver, en la presentación de la programación, reconocía que «tenemos un programa muy completo, que cuenta con asociaciones, participación ciudadana y un gran número de solicitudes para las jaimas y el mercado de artes y oficios por lo que esperamos una gran afluencia”, agregaba. “Animo a todos a que vengan a sentir un evento que poner en valor nuestro patrimonio y nuestra historia y que lo disfruten tanto como lo disfrutamos nosotros”, concluía el primer edil, no sin agradecer el trabajo desarrollado por las concejalías de Turismo y de Ferias, así como de todas las asociaciones y personas implicadas. En este sentido, desde el Ayuntamiento de Monzón se hace un llamamiento a todos aquellos que no sean de Monzón a que visiten la ciudad en el fin de semana más ‘histórico’ y representativo del municipio que forjó la infancia del gran rey aragonés Jaime I El Conquistador.

*Consulta aquí la programación completa del Mont-Rodón de Monzón

Por su parte, el edil de Turismo, Jesús Guerrero, muestra su gratitud al más de centenar de entidades, asociaciones y colectivos implicados en la organización. “Tenemos la firme voluntad desde el Ayuntamiento de que el Homenaje vaya a más. En tres, cuatro o cinco años puede ser una fiesta muy potente no solo a nivel nacional sino también internacional y se está trabajando para eso», explica el edil.

El propio Guillem de Mont-Rodón (al que da vida José Manuel Baena), que lleva 20 años en la piel del maestre templario, explica que «alguien tiene que hacer de Guillem de Mont-Rodón” y señala que el verdadero mérito es “de todas las instituciones y el trabajo de todas las asociaciones que desde el principio creyeron en el homenaje y en el potencial que tiene Monzón “. 

LA HISTORIA DE GUILLEM DE MONT-RODÓN

Los frares templarios de Monzón forjaron una leyenda que discurre a través de 166 años. Tras los muros de su castillo almacenaron diezmos, ganaron guerras, resistieron asedios y educaron reyes.
Jaime I, rey de Aragón, fue educado en Monzón entre 1214 y 1217 por el maestre templario Guillem de Montrodón, infanzón que llegó a la maestría por su coraje y su labor al lado de Pedro II. Tres años determinantes para su futuro. Por ello se realiza este homenaje que cada año los montisonenses celebran en honor al maestre templario.