La pandemia se ha llevado por delante un gran número de comercios y vías principales de la ciudad, como la calle Alfonso, lucen ahora un aspecto desolador. El Ayuntamiento de Zaragoza ha impulsado, desde el Área de Urbanismo, un plan para reconvertir locales comerciales en viviendas, salas de exposiciones o garajes, una iniciativa que busca hacer revivir las calles más castigadas.


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La parálisis del mercado se refleja en el informe sectorial realizado por Gamerin respecto a los locales comerciales en Aragón. En el cuarto trimestre de 2020, las compraventas de locales cayeron en términos interanuales un 16,10%.

En el caso concreto de la capital aragonesa, las operaciones descendieron un 12,38%. De hecho, durante todo el trimestre, sólo se llevaron a cabo 127 operaciones en la ciudad. El precio del metro cuadrado se situó en 1.013 euros, con un notable descenso trimestral (-9,63%). El precio medio por local comercial se ha situado en 92.064 euros, mínimo histórico.

Además de la caída, tanto del precio como de las ventas, está el problema de los alquileres, que han centrado gran parte de la jornada que ha servido para presentar el informe. El presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad de Aragón, Fernando Baena, ha hecho un llamamiento a los arrendatarios: «los locales valen lo que valen y hay que ayudar al arrendatario, sobre todo al principio».

En su opinión, se deben buscar fórmulas «imaginativas», como ofrecer 1 o 2 años con rentas «políticas» para superar la crisis. Ha recordado que el arrendador tiene «un cliente que expone su patrimonio para lanzar un negocio adelante», por ello, desde el Colegio, «intentamos convencer al propietario de que quien abre un negocio hoy es un prácticamente un héroe y hay que echarle una mano«.

En términos similares se ha pronunciado el presidente de la Federación de Empresarios de Comercio y Servicios de Zaragoza, José Antonio Pueyo, que ha aplaudido la iniciativa municipal de dar nuevos usos a los locales comerciales, si bien «además de viviendas, garajes o trasteros, se pueden tener más usos».

Entre ellos, ha nombrado la posibilidad de que actividades comerciales ubicadas en pisos, como consultas médicas, se reinstalen en locales vacíos con el fin de «llenar huecos». En ese sentido, Pueyo ha señalado que desde ECOS «seguiremos presionando».

«Cada vez hay menos venta de prodicto físico en mostrador», ha recordado Pueyo, que ha señalado también lo «gravosa» que es la plusvalía en las transacciones inmobiliarias, las cuales «se comen gran parte de los ingresos, ya que el precio del suelo iguala o supera el precio de la construcción».