Que los datos de paro han empezado a ser alentadores en el último año es una realidad. Sin embargo, hay un sector de la población para el que acceder a un empleo sigue comportando grandes dificultades, y este es la población que no cuenta con estudios superiores, habiendo superado como máximo el primer ciclo de la educación secundaria.

Es una de las conclusiones que muestra la última memoria anual del Observatorio del Mercado del Instituto Aragonés de Empleo. Si bien el descenso del paro fue generalizado en 2021 en Aragón, la mayor parte de desempleados, concretamente el 69,56%, solo posee estudios de primera etapa de educación secundaria o inferior, y en los niveles de formación superior se incrementa el peso del colectivo femenino.

En cuanto a la edad, más de la mitad de los parados en Aragón (54,67%) eran mayores de 45 años, seguidos por el grupo de edad de 25 a 44 años con el 37,54% de los desempleados y los jóvenes de menos de 25 años, que suponían el 7,79% restante. Tal y como muestra el informe, el colectivo con mayores dificultades para incorporarse al mercado laboral son los mayores de 60 años (tardan de media 1.313 días), y en especial las mujeres de este grupo (1.427 días). Este dato confirma que existe una relación directa entre la edad y la duración media de la demanda en desempleo ya que, conforme aumenta la primera también lo hace la segunda.

UN 25,86% PARADOS MENOS

La cifra de desempleados en Aragón al término de 2021 descendió hasta las 61.065 personas, lo que representa una caída anual del -25,86% que tuvo reflejo en las tres provincias aragonesas: -32,94% en Huesca, -30,72% en Teruel y -23,98% en la provincia de Zaragoza. Por género, el 40,62% de las personas sin empleo registradas en las oficinas del INAEM era hombres y el 59,38% restante, mujeres.

Por sectores económicos, el descenso del desempleo durante el pasado año fue generalizado, con la mayor disminución en valores absolutos respecto a 2020 protagonizada por el sector servicios con 13.149 parados menos. En términos relativos, el dato más significativo corresponde al colectivo sin empleo anterior con un descenso del 41,03%, seguido de agricultura (-30,24%).

En 2021 el número de contratos firmados en Aragón aumentó hasta los 565.512, lo que supone un incremento anual del 23,49% (107.579 contratos más que en 2020), mientras que en el conjunto nacional el ascenso fue inferior, del 21,58%. Ese total de contratos en Aragón fue suscrito por 214.366 personas diferentes, lo que supone que cada persona trabajadora firmó en promedio 2,64 contratos. En términos interanuales aumenta el número de personas contratadas un 12,18% (23.271 más que en 2020) y se incrementa ligeramente el promedio de contratos firmados por cada persona trabajadora, que en 2020 fue de 2,40 contratos.

Cabe destacar también que el 9,94% de los contratos rubricados en Aragón en 2021 fueron de carácter indefinido, un porcentaje que se ha ido incrementando considerablemente en los primeros meses de este año, alcanzando en marzo de 2022 (último dato disponible) el 28,58% de los contratos firmados en nuestra Comunidad Autónoma.

De cada 100 contratos firmados en Aragón en 2021, 56 han sido suscritos por hombres y 44 por mujeres. La evolución ha sido positiva para ambos géneros, siendo más intensa para ellas (+24,46%) que para ellos (+22,73%). Por edad, las personas entre 25 y 44 años han suscrito el 50,68% de los contratos; las de 45 o más años el 27,22% y los menores de 25 años el 22,11% restante.

En 2021, entre las nueve ocupaciones que registraron un mayor número de contratos acumularon más de la mitad de los rubricados en la Comunidad (51,08%). Se trata de trabajadores de las industrias manufactureras, peones agrícolas, camareros, personal de limpieza, vendedores de tiendas y almacenes, empleados de transporte de mercancías y descargadores, ayudantes de cocina y conductores de camiones.

Además, durante el pasado año se produjeron 20.877 llamamientos de contratos fijos discontinuos, incrementándose un 21,69% respecto al año anterior y correspondiendo a 12.004 personas, 5,93% más que en 2020, con una media de 1,74 llamamientos por persona.