La empresa aragonesa Montepino, gestionada por Valfondo, adquirirá los suelos de la antigua Universidad Laboral de Zaragoza, situados en el polígono de Malpica, para levantar naves destinadas a atender la demanda de grandes superficies de suelo industrial para el sector de la inmologística y del e-commerce. En total, se prevé la creación de 2.500 puestos de trabajo cuando el proyecto esté a máximo rendimiento y supondrá una inversión de 150 millones iniciales a los que se sumarán otros 75 de los futuros inquilinos. En total, 225 millones de euros. Las obras se iniciarán en la primavera del próximo año y estarán acabadas a finales de 2024, según las previsiones de uno de los mayores gestores especializados en inmologística en España.

El anuncio de la compra se produce en paralelo a la aprobación en Consejo de Gobierno de la declaración de interés autonómico de la inversión y el interés general de la actuación que ha de permitir implantar actividades productivas que atraigan nuevas empresas, estimulando así la riqueza y la recuperación económica de Aragón. De la misma manera, el Gobierno ha aprobado el convenio de colaboración que firmará próximamente con la Entidad Pública Empresarial de Suelo (Sepes) para posibilitar los procedimientos y las tramitaciones necesarias en el menor plazo de tiempo.

Los acuerdos ratificados por el Ejecutivo aragonés constituyen el pistoletazo de salida de este proyecto que, con 384.000 metros cuadrados disponibles, supondrá la mayor oferta de suelo industrial neto en España. La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (cartera de la que depende el Sepes), Raquel Sánchez, y el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, como copropietarios de los suelos de la antigua Laboral en el polígono de Malpica, han mantenido un encuentro de trabajo con ocasión del impulso que ha recibido esta inversión y han corroborado la importancia de la colaboración entre las Administraciones y la trascendencia de una iniciativa que está volcada en la creación de empleo y, por lo tanto, en la reconstrucción económica, que constituye un objetivo irrenunciable para ambos ejecutivos.

El presidente Lambán ha explicado que se están poniendo los cimientos para la venta de suelo industrial de la parcela más importante vendida en Aragón y posiblemente en España, y ha destacado que los 2.500 puestos de trabajo que generará suponen “la segunda mejor cifra” que ha podido anunciar después de la inversión de BonArea. De la misma manera se ha felicitado del trabajo “bien hecho, y del esfuerzo de concertación que ha habido entre el Gobierno de Aragón, Sepes y la empresa Montepino”.

El proyecto afecta a una manzana de 940 metros de longitud por 440 de anchura media, que conforma una superficie de 415.000 metros cuadrados (de los que habrá que descontar las cesiones de zona verde al Ayuntamiento de Zaragoza).105.000 metros cuadrados son titularidad del Sepes y los 308.000 restantes del Gobierno de Aragón.

Montepino realizará una inversión inicial de 150 millones, a los que se sumarán otros 75 millones por parte de los inquilinos que quieren establecerse en Aragón y con los que la empresa ya ha establecido contacto, aunque por motivos de confidencialidad no se han desvelado más detalles.

LA LLEGADA DE DOS COMPAÑÍAS

El proyecto consiste en el desarrollo de alrededor de 177.000 m2 construidos, que estarán distribuidos en al menos dos edificios logísticos, modernos, sostenibles e innovadores desde el punto de vista tecnológico. Los nuevos edificios se levantarán bajo los parámetros del Leed Gold, que es un sistema internacional de certificación sostenible. Además, se acondicionará el espacio con una zona verde y un aparcamiento de 1.100 plazas y otros edificios de usos administrativos y oficinas.

Estos suelos calificados hoy como sistemas generales y de uso educativo público precisarán la redacción de un Plan de Interés General de Aragón (PIGA) para transformarlos en suelos capaces de acoger cualquier uso productivo autorizado en el Polígono Industrial de Malpica, definido en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), como zona A-6, Grado 1. El ámbito al que afectará el PIGA estará integrado también por otra manzana de 54.841 m2, propiedad íntegra del SEPES, que nunca fue puesta en servicio y que queda al margen de la opción de compra de Montepino, pero junto con la otra manzana supone casi 470.000 m2 de suelo urbanizado.

Las previsiones establecen un plazo de dos meses y medio para completar la redacción del PIGA, que incluirá la ordenación urbanística, el proyecto de urbanización, el de reparcelación y los proyectos constructivos de las naves y otras edificaciones. Así, se estima que la aprobación inicial de esta figura de ordenación del territorio se producirá en septiembre de 2022 y la definitiva, en febrero de 2023, de manera que el inicio de las obras se fijaría para la primavera de 2023. La primera fase de obras precisará un año y un periodo similar la habilitación de los últimos espacios proyectados, de manera que la obra estará concluida a finales de 2024, generando 2.500 puestos de trabajo cuando el complejo esté a pleno rendimiento.

De esta manera, este suelo de grandes dimensiones que desde hace 25 años se encuentra sin uso para la sociedad pese a estar perfectamente comunicado, con acceso rodado por tres de sus cuatro lados y lindante a la carretera N –II, y dotado asimismo con todos los servicios urbanísticos exigibles, como agua, saneamiento, y electricidad, volverá a ponerse en uso, representando además una opción responsable del uso del suelo, ya que prioriza el ya desarrollado.

EL RESTO DE INVERSIONES

Esta actuación se suma a otras inversiones empresariales que el Gobierno de Aragón ha impulsado por todo el territorio, ya sea a través de Plaza, PLHUS, en Huesca, Platea en Teruel, PLFraga, o a través de las que tienen un destino específico como la agroalimentaria de Épila, las impulsadas para dar cobertura a Amazón Web Services en Huesca, Villanueva de Gállego y el Burgo de Ebro, o las que se canalizan a través de las ampliaciones de Plaza y del Aeropuerto de Teruel, o la plataforma al norte de Zuera, que quiere ser la quinta plataforma logística autonómica.

De hecho, en el conjunto de Aragón, durante estas dos legislaturas se han declarado de interés autonómico 53 proyectos (sin contar los correspondientes a energías renovables) con una inversión prevista de más de 4.100 millones de euros y la generación de un mínimo de 14.000 empleos.

De hecho, el impulso a la transformación de los suelos de Malpica es consecuencia directa del protocolo de actuación suscrito en el mes de noviembre entre el consejero de Hacienda y Administración Pública, Carlos Pérez Anadón, y el director general del SEPES, Jesús Lucrecio Fernández Delgado, que ha conseguido activar los procesos administrativos antes del verano, que era la fecha de referencia.

La preparación de los suelos de Malpica supone para el Gobierno de Aragón la mayor venta de suelo industrial de la historia. La magnitud de la iniciativa es tal que el suelo de la antigua Laboral supone casi dos veces y media la superficie de la planta de Inditex en Plaza. La parcela total, incluyendo el suelo del que es titular Sepes, supone ocho hectáreas más que la última ampliación de la plataforma logística, de 33,5 hectáreas.