Los cada vez más habituales vehículos, tanto industriales como particulares, que funcionan con GNL o GNC, disponen de un nuevo punto de repostaje en una zona clave en Zaragoza: las inmediaciones de Plaza. La instalación, ubicada en la Estación de Servicio El Cisne, en el kilómetro 309 de la A2, ha sido desarrollada por Redexis, en la que ha invertido en torno a 1 millón de euros.


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Se trata de una localización estratégica para el transporte de mercancías, por donde diariamente circulan más de 6.000 vehículos pesados. La estación de servicio forma parte del Grupo Zoilo Ríos, que viene realizando en los últimos años una apuesta por la movilidad sostenible y la incorporación de las energías renovables tanto a su oferta como a su modelo de gestión. De hecho, sus responsables confían en que esta gasinera pueda ofrecer en un futuro cercano gas de origen 100% renovable.

Esta instalación permite el suministro regular de Gas Natural Vehicular tanto en forma de GNL para camiones de mercancías de larga distancia, como en forma de GNC para turismos, furgonetas y camiones; con tiempos de repostaje comprendidos entre los 3 minutos para turismos y los 8 minutos para vehículos pesados.

Gracias a esta nueva gasinera en Zaragoza, junto a la existente en la Cooperativa de Taxis y Mercazaragoza, las empresas de transporte de pasajeros, de mercancías, las flotas de empresas y los turismos particulares pueden tener acceso a este combustible más sostenible que los carburantes tradicionales.

LAS VENTAJAS DEL GAS

El gas vehicular es una alternativa real de movilidad sostenible, con bajas emisiones de CO2 y que no emite partículas ni óxidos de azufre. Su implantación contribuye a mejorar la calidad del aire de las ciudades y reducir su nivel de ruido.


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Los vehículos de GNV son igual de seguros y cuentan con la misma potencia que otros motores de combustión. Asimismo, permiten circular en escenarios de alta contaminación, gracias a que cuentan con la tarjeta ECO de la Dirección General de Tráfico (DGT), lo que supone una gran ventaja de acceso a grandes ciudades ante posibles restricciones de tráfico. Los vehículos de GNV son aptos asimismo para todo tipo de movilidad: conducción urbana, interurbana o de larga distancia.