«Tranquilos, no es nadie». Eso es lo que decían los aficionados que, a la caza de autógrafos de futbolistas, se acercaban al coche del aragonés Víctor Alfaro a la entrada de la ciudad deportiva del Real Madrid. «Está bien que te lo recuerden», suele explicar el propietario de Podoactiva, pero la humildad es algo inherente a un empresario cuando éste ha empezado desde abajo.


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Podoactiva era en su origen, en 1994, muy distinta a la red de clínicas que conocemos hoy en día: una pequeña consulta de 20 metros cuadrados en la que se ofrecían diversos tratamientos: al principio de enfermería, después de fisioterapia, remedios para dejar de fumar…

«Hacía guardias de enfermería de 12 horas en el hospital de Barbastro, dos días a la semana iba a hacer prácticas a Manresa, donde estaba estudiando Podología, y los fines de semana tocaba en una orquesta por los pueblos de la provincia», recuerda el empresario. Su espacio de ocio era, junto a la que hoy es su esposa, limpiar la consulta y ordenar papeles.

El primer contacto con la podología lo tuvo cuando contrataron a un profesional para incorporar sus tratamientos. También se unió a la empresa su hermano Javier, 10 años más joven. A partir de moldes de escayola elaboraban plantillas con una máquina que estaba hecha con un motor de nevera.

Arqueología empresarial: Así era el taller antiguo de Podoactiva / Podoactiva

Durante los primeros años de andadura, Podoactiva amplió la cobertura de servicios por toda la provincia de Huesca, especializándose en estudios biomecánicos de la marcha y tratamientos en forma de plantillas personalizadas. En 2004, la compañía consiguió su primer gran logro: hacerse cargo de la Unidad de Podología y Biomecánica de la Clínica Quirón de Zaragoza. Este servicio sigue actualmente en funcionamiento.


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De la plantilla a partir de moldes de escayola pasaron a analizar la pisada con los escáner 3D que existían en el mercado. Pero pisar sobre una superficie rígida supone que el pie se aplaste, por lo que no es posible obtener datos óptimos. A partir de ahí crearon su propio sistema de escaneo en 3D basado en pisar sobre una membrana elástica que recoge el pie. Esa imagen es captada por un láser y se genera el archivo 3D.

También  desarrollaron el programa informático para poder diseñar la plantilla en función de lo que necesitaba el paciente , así como el sistema robotizado para elaborar las plantillas. A día de hoy, sus dispositivos han evolucionado y actualmente ya utilizan impresión 3D de alta gama, nanotecnología, Inteligencia Artificial que asiste al diseño, sistema de producción mediante línea con RFDI, etc.

Analizando la pisada del futbolista Fernando Torres / Podoactiva

¿CÓMO SE ENTRA EN EL REAL MADRID?

Podoactiva empezó a trabajar con deportistas en Huesca y Zaragoza, y vieron que debían dar el salto. Pero, ¿cómo entrar en clubes de la dimensión del Real Madrid o el Atlético de Madrid?: «Pues, sencillamente, llamando«, explica Víctor Alfaro. «Sólo necesitas 20 segundos de coraje», porque «lo normal es que cuando tú llamas y hablas con honestidad, la gente te atienda».

No obstante, «ese cartucho sólo lo puedes gastar una vez», por ello «tienes que tener muy claro lo que les vas a contar y que lo que les cuentes es verdad y funciona«. A este respecto, es crítico con el camino que siguen algunas startups: «No hay que vender burras, y en ocasiones te encuentras con mucha mentira, con ideas copiadas de otras ideas, cuyo valor es cercano a cero».


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Podoactiva tenía un buen producto y lo supieron vender. Trabajar para equipos como el Real Madrid, la Selección Española de Fútbol, o jugadores como Fernando Torres o David Villa impulsó su prestigio. Paralelamente, empezaron a abrir sus clínicas propias en distintas ciudades españolas.

A día de hoy, el objetivo es estar presentes en todas las capitales de provincia. También trabajan fuera, con clínicas en ciudades como Milán. «Necesitaría tres vidas», se lamenta Víctor Alfaro, que ya puede presumir de haber escrito un libro y acaba de depositar su doctorado a sus 48 años.

Javier Alfaro y David Villa, con sus plantillas personalizadas / Podoactiva

«La vida es tener retos por delante», señala, y en Podoactiva ya trabajan con una plantilla inteligente con una capa de IA que guarda datos en la nube y avisa si el deportista está en riesgo de lesión. Además, está previsto que en 2022 abran en Walqa el Centro de Universitario de Podología Podoactiva, con la Universidad de Zaragoza. «Nos cerrará el círculo», comenta Alfaro, porque «permitirá generar cantera, ya que encontrar personal cualificado es una gran barrera».

MOMENTOS INCREÍBLES

Echando la vista atrás, Víctor se acuerda de «momentos increíbles», como «haber celebrado cuatro Champions con el Real Madrid en Cibeles«. No obstante, una de las iniciativas de las que se siente más orgulloso es haber puesto en marcha una unidad móvil que recorre los pueblos más recónditos de Huesca para ofrecer sus tratamientos. «Hace que seamos transversales y, ahora que se habla tanto de la España Vaciada, si llevas servicios de calidad, logramos que lo esté menos».

Entre las claves que han llevado a Podoactiva donde está, Víctor indica la de «poner al paciente en el centro, que sienta que cuando le atendemos estamos haciendo lo más importante de nuestra vida». Pero, sobre todo, la mayor habilidad ha sido, en su opinión, «saber crear un gran equipo».