Tras el boom inmobiliario previo a 2008 y la consiguiente crisis, uno de los ámbitos constructivos que había quedado más atascado había sido el de la vivienda de protección oficial. Sin embargo, en los últimos tiempos, gracias al desbloqueo de amplias zonas de Zaragoza para su urbanización, se ha abierto un abanico de posibilidades para poder adquirir obra nueva por precios competitivos.

Las últimas parcelas que ha sido licitada por parte del Ayuntamiento de la capital aragonesa, hace apenas una semanas, están ubicadas en La Jota – Vadorrey. El objetivo es construir un total de 147 viviendas protegidas de Aragón, en favor de cooperativas y entidades, promotores, constructores y entidades, todos ellos sin ánimo de lucro.

En este caso, se trata de parcelas resultantes del Proyecto de Reparcelación del Área de Intervención F-52-1, es decir, los terrenos entre el Tercer Cinturón, la urbanización Vadorrey y avenida de La Jota. Se trata de dos parcelas con capacidad de para 63 y 84 viviendas, teniendo la primera una superficie de 1.915 m2 la primera y 17.720 m2 la segunda.

Estas parcelas ya fueron licitadas previamente, el pasado mes de agosto, pero han vuelto a ser lanzadas por renuncia del adjudicatario. En dicha convocatoria de verano, el Consistorio sacó a concurso un total de cuatro parcelas en distintos puntos de la ciudad, que sumaban un total de 206 viviendas de protección oficial. El volumen global de la operación urbanística fue de 5,5 millones de euros.

No obstante, al margen de estos últimos solares ubicados en La Jota, la zona de El Portillo y Santa Isabel, son muchos los proyectos que actualmente en la ciudad se encuentran en fase de construcción y/o comercialización.

Uno de los puntos clave es el barrio de Arcosur, donde actualmente diferentes promotoras están levantando y comercializando edificios de protección oficial, tanto de Régimen General como de Régimen Tasado. A pesar de contar con precios mucho más contenidos que la vivienda libre, disponen de las ventajas de la obra nueva, con zonas comunes y sistemas de eficiencia energética muy por encima de las viviendas de segunda mano.

¿CÓMO ACCEDER A UNA VPO?

Una de las principales características de las VPO en Aragón es que la superficie máxima de la vivienda no puede superar los 90 m2 (a no ser que se trata de viviendas adaptadas para personas con discapacidad). Por su parte, las plazas de garaje y los trasteros también están limitados a unas dimensiones máximas.

La gran ventaja, es que el valor de los inmuebles es muy inferior a la vivienda libre, si bien sólo se puede acceder a los mismos si se cumplen una serie de condiciones. Por ejemplo, es obligatorio que el comprador utilice la vivienda adquirida como residencia habitual. Asimismo, no puede ser propietario de otros inmuebles.

Asimismo, en 2023 se han revisado los ingresos máximos para poder comprar una VPO en Aragón. Para solicitar una VPO, es necesario inscribirse en el Registro Único de VPO en Aragón. Es este organismo el que se encarga de gestionar todos los documentos y para valorar si se cumplen o no los requisitos para obtener la vivienda.

La inscripción en el Registro tiene una duración de 3 años. Dentro de este tiempo, es posible cancelar la solicitud de forma gratuita o modificar cualquier dato que se haya aportado en los documentos.