Las ensaimadas de Mallorca, ese delicioso y tradicional manjar balear, han conquistado los paladares de personas de todo el mundo. Es uno de los recuerdos que más turistas eligen para regalar en el regreso a casa tras las vacaciones. Su textura esponjosa, su sabor dulce y su peculiar forma en espiral hacen de este producto un verdadero icono gastronómico de la isla. Sin embargo, a pesar de su popularidad, llevar ensaimadas de Mallorca en los aviones puede resultar en una problemática inesperada debido a las normativas y restricciones de seguridad aérea.

Eso es lo que le ha pasado a una pareja mallorquina que viajaba a Alemania cuando al llegar al mostrador de la compañía Ryanair les exigieron 45 euros a cada uno por facturar el tradicional dulce como equipaje de mano. La tarifa que ellos habían pagado no les permitía subir nada a bordo y las cajas fueron consideradas como un bulto más. Momento en el cual los pasajeros decidieron regalar las ensaimadas en vez de pagar la cuantía. Y fueron degustadas por el personal de limpieza del aeropuerto.

Aena concede libertad a las aerolíneas para aplicar sus propias políticas de equipaje, que varían de forma notable de unas a otras. Vueling permite acceder con dos de estos dulces por persona, Air Europa especifica en su página web que permite a cada pasajero transportar hasta dos ensaimadas empaquetadas de forma conjunta por persona en la cabina del avión sin coste adicional alguno. Ryanair considera que las ensaimadas es un bulto extra equiparando su tratamiento al de una maleta de mano a la hora de subir al avión.

Esta medida se ha endurecido en los últimos meses por lo que resulta imposible subir la caja al avión sin pagar. Ahora mismo la aerolínea sólo permite acceder con una ensaimada sin pagar un coste adicional si ésta ha sido adquirida en las tiendas del aeropuerto tras pasar el control de seguridad.

Ante esta problemática que afecta a tantos Panaderos y Pasteleros de la Isla el Gobierno de Baleares, a través de la Consejería de Turismo, Trabajo y Modelo Económico, junto con el Consell de Mallorca, están llevando a cabo gestiones para organizar una reunión entre Ryanair y la Asociación de Panaderos y Pasteleros de las islas que permita llegar a un acuerdo para que los pasajeros puedan acceder al avión con este suvenir gastronómico sin pagar por ello.